El hospital está
situado en la parte norte de la ciudad de Terrassa , Barcelona, en la carretera
que va hacia el termino municipal de Matadepera,
En los alrededores
del hospital tenemos varios lugares abiertos donde aún es posible la entrada,
además de una iglesia que se encuentra en ruinas y los jardines del propio
hospital, lugar que pone los pelos de punta y donde hubo numerosos suicidios
años atrás cuando el hospital se encontraba en pleno funcionamiento.
En la década de los
50 el hospital acogía a pacientes con enfermedades de origen respiratorio como
tuberculosis o cáncer de pulmón. Los internos que había en el antiguo hospital
del Tórax de Terrassa provenían de las distintas comunidades autónomas, ya que
el hospital pertenecía al Ministerio de sanidad.
El hospital constaba
de dos alas principales , 9 pisos de
altura y sótanos además de una capilla y un deposito de cadáveres.
La lejanía parecía
influir en el estado anímico de la mayoría de pacientes que se sentían
abandonados por sus familiares ya que la distancia en ocasiones era mucha y la
mayoría de ellos no podía dejar su trabajo ni su vida cotidiana para estar al
lado de sus familiares enfermos, lo que para muchos internos suponía un estado
depresivo que añadido a su estado físico de salud a veces terminal, les incitaba al suicidio.
Eran demasiado
habituales los suicidios en el hospital, superando con creces las estadísticas
de cualquier otro centro sanitario de la época.
Los internos se
lanzaban al vacío desde las ventanas de las últimas plantas, cayendo en el
jardín trasero del hospital, el cual habían apodado “la jungla” debido a los
gritos que se solían escuchar de la gente que se suicidaba y los de aquellos
internos que gritaban frases como “ya ha caído otro.”
Actualmente el
hospital se encuentra en su mayor parte cerrado, a la espera de las obras que
en breve comenzarán, solo está activa una parte donde la productora Filmax hace
los rodajes de algunas películas y otra ala, donde se encuentra la residencia
para disminuidos psíquicos profundos “La Pineda” que pertenece a la Generalitat
de Cataluña y tiene capacidad para 62 plazas residenciales.
Actualmente los
rumores sobre sucesos extraños en el interior del hospital y en sus alrededores
son bastante comunes por parte de aquellas personas que acuden a este antiguo
hospital, bien sea por asuntos de trabajo o por simple curiosidad, ya que la
leyenda forjada sobre el lugar es cada día más conocida fuera de Cataluña.
Algunas de las
personas que aseguran haber experimentado situaciones extrañas dentro del
hospital son actores y gente relacionada con el mundo del cine que han estado
allí mientras se rodaba alguna película.
También algunos
empleados aseguran escuchar voces y ruidos que parecen provenir de la parte
abandonada del antiguo hospital y como no, aquellas personas que se acercan
hasta sus muros para realizar pruebas de tipo psicofonías o simplemente curiosear en el lugar.
Los fenómenos
extraños que más cabida tienen dentro del hospital según los testigos son, los
ruidos extraños, una sensación extraña en el ambiente, el cambio brusco de
temperatura, el mal funcionamiento de los aparatos de grabación y las cámaras
fotográficas, la aparición de sombras, …
En el antiguo hospital
se han rodado escenas de varias películas entre ellas ‘The Machinist’ ,
“Fragiles”, “Ouija” o “Los sin nombre”
Brad Anderson,
director de la película “The Machinist”, la cual se rodó íntegramente en el
hospital del Tórax, asegura que es un lugar espeluznante.
La verdad es que
Anderson conoce bien el lugar, ya que su anterior película “Sesión 9″ también
fue rodada en el antiguo hospital.
En la película “Los
sin nombre” la filmación de la autopsia de la niña desaparecida se realizó en
el antiguo Hospital del Tórax de Terrassa, en donde según cuentan algunos del
equipo técnico, ocurrieron fenómenos paranormales: ruidos extraños, cambios
bruscos de temperatura, etc. Según el director Jaume Balaguer, “los actores
iban al baño de dos en dos por que tenían miedo”.
Para el filme
“Fragiles” Balaguer se inspiró en una “historia mínima” que le contaron “que me
hizo fabular y llenar la cabeza de imágenes”, así como en su visita anterior al
Hospital del Tórax de Terrassa, cerrado hace varios años.
Otra de las películas
que nos ha dejado huella ha sido sin duda “Ouija” Que se rodó en el cementerio
de Terrassa (lugar donde se registran numerosas voces de tipo psicofonía), el
hospital del Tórax y un pueblo llamado Mura, que se encuentra cerca de
Terrassa.
Este rodaje también
ha estado marcado por el escalofrío que causa el lugar. Una de las actrices,
Montse Mostaza en una entrevista realizada por Akalina cine dijo que se
respiraba algo extraño en el ambiente o el director de la Monja que aseguró
haber vivido cosas muy extrañas en el hospital y que jamás volvería.
También productores
amateur como Albert Álvarez hablan sobre sus experiencias dentro de este
terrorífico hospital, personas como Sara y Lucia que aseguran haber tenido
experiencias de lo más escalofriantes, empleados del centro de disminuidos
psíquicos la Pineda o personas que nada tienen que ver con este lugar que han
acudido atraídos por la curiosidad o las ganas de encontrar respuestas.
Algunos empleados del
centro de disminuidos psíquicos que está en la parte habilitada del hospital
aseguran haber vivido situaciones extrañas, como que el ascensor venga a la
planta donde están ellos sin que nadie los haya llamado o presenciar como
aparece humo y neblinas de la nada dentro de algunas habitaciones.
También son muchas
las personas que han sufrido fenómenos extraños dentro del hospital y que el
lugar nada tiene que ver con su trabajo, simplemente han entrado por curiosidad
o para realizar grabaciones y fotografías.
Según cuentan estas
personas dentro han vivido situaciones de autentica extrañeza como realizar
grabaciones de vídeo y que luego las cintas aparezcan vírgenes, realizar
fotografías y que la mayoría luego no salgan o incluso llegar a sufrir
anomalías con los teléfonos móviles.
Pero sin duda el
fenómeno más común en este hospital es el relacionado con las anomalías en los
aparatos y la sensación extraña de sentirte acompañado, como si en el lugar
hubiese mucha actividad, aunque también cuentan los testigos otros tipos de
experiencias donde las sombras, visiones y fenómenos paranormales están
presente.
En los alrededores
del hospital del Tórax tenemos lugares cargados de misterio, como la Iglesia
abandonada, lugar donde los grupos de corte satánico organizan rituales y donde
las cámaras fotográficas y aparatos de grabación en ocasiones parecen
descontrolarse y funcionar solo en determinados lugares.
También tenemos la
casa del palomar, donde los cambios bruscos de temperatura son bastante
habituales y en alguna ocasión se han descargado baterías y pilas que los
curiosos llevaban de recambio para sus aparatos.
La segunda casa es un
lugar curioso, aunque quizás es el lugar que menos sucesos extraños contempla a
sus espaldas, quizás por que casi siempre suele estar cerrada.
El último lugar de
los alrededores del hospital a destacar es sin duda los jardines de la parte
trasera “la jungla” lugar donde caía la gente que se lanzaba al vacío atentando
contra su propia vida y desde donde se oye según algunos testigos voces, gritos
y lamentos.